Desde muy joven supe que el cuerpo hablaba. No con palabras, sino con síntomas, cambios repentinos, sensaciones que parecían no tener causa lógica. A veces subía de peso, otras bajaba sin razón. A veces aparecían alergias, dolores en las rodillas, inflamación, incomodidad al caminar. Para mí, lo físico nunca fue solo físico. Siempre sentí que había algo más allá, algo que necesitaba ser escuchado.
Durante mucho tiempo observé esos movimientos, tratando de entender lo que el cuerpo quería decirme. No buscaba «curarme», sino comprender. Y fue gracias a la meditación que encontré una vía más clara para trabajar con el cuerpo, no solo como un mensajero, sino como un maestro profundo. Empecé a experimentar prácticas que me ayudaban a entrar en contacto directo con esas memorias, emociones y verdades almacenadas en cada célula.
Así nació esta propuesta: «El Más Allá del Cuerpo: Sabiduría Encarnada», un espacio de práctica vivencial donde el cuerpo no solo se habita… se honra. Porque dentro de él están las huellas de nuestras historias, nuestros silencios, nuestras emociones no expresadas, nuestras verdades más profundas.
Saraha
Blog: El más allá del Cuerpo
